TODO CARRIO

Toda la información de Elisa Carrio y el ARI

28.1.06

El ARI fustiga el pase de duhaldistas al kirchnerismo

"Nosotros nos sentimos la segunda fuerza política en la provincia, teniendo en cuenta que el Frente para la Victoria y el PJ tienen la misma estructura", aseguró, por su parte, el titular del ARI bonaerense, Carlos Raimundi.


Consultado sobre la conversión al kirchnerismo de dirigentes duhaldistas, Raimundi señaló que lo tomó sin sorpresa: "Ya lo sabíamos, esto es la confirmación de la hipocresía"."Son lo mismo. Lo grave no es el sello, sino que los une la concepción de la política como negocio y los mantiene en el poder se llamen kirchneristas o duhaldistas", afirmó el dirigente del ARI.


Para Raimundi, con esto "se legitima la traición porque se compran también las pertenencias políticas e ideológicas a partir de la dependencia del dinero del gobierno nacional", y así "los dirigentes se pasan por compra de voluntades"."El transversalismo es el ropaje con el que se vistieron aquellos que no podían aceptar de la noche a la mañana ser absorbidos por el aparato", enfatizó.

27.1.06

Desde el ARI rechazan concertación opositora

El diputado nacional Carlos Raimundi manifestó que sólo hay una coincidencia en un punto concreto, como es el rechazo al interés de Néstor Kirchner por controlar el Consejo de la Magistratura

El diputado nacional Carlos Raimundi, del ARI, dijo que la existencia de una postura común de la oposición para rechazar reformas al Consejo de la Magistratura, no habilita la conformación de una “concertación opositora”, porque “sería mentirle a la gente y hacer algo tan artificial como lo fue la Alianza en 1999”.

En declaraciones al programa de Radio Platense (FM 89.9), “Enfoque Provincial”, que se emite los lunes, miércoles y jueves de 17 a 18 horas, Raimundi afirmó que “no hay ninguna posibilidad de concertación y esta coincidencia es un motivo determinado, que es tratar de impedir que se apruebe este proyecto de reforma al Consejo de la Magistratura, pero es por la negativa en este punto concreto”.

De esta manera, el legislador salió al cruce de una sugerencia de concertación que hace unos días había realizado el ex candidato a senador nacional por PRO, Ricardo López Murphy.

“No es posible una concertación opositora porque no tenemos nada que ver desde el ARI con López Murphy o con Macri”, disparó el representante bonaerense en el Congreso de la Nación.

Raimundi aclaró que “acá no se trata de establecer una concertación sino impedir el atropello, pero ir más allá sería mentirle a la gente haciendo alguna alianza totalmente artificial como fue la del ‘99”.

Más allá de la oposición a las reformas, Raimundi admitió la necesidad de darle mayor agilidad al organismo que designa y remueve jueces federales. No obstante, señaló que el Gobierno nacional con su anunciada reforma “quiere que detrás de algunos argumentos se escondan malos objetivos”.
“Es verdad que hay que reducir gastos innecesarios, pero de ahí que para conseguir eso lo que se quiere realmente es introducir de contrabando la posibilidad de controlar el Consejo, entonces estamos cayendo en el viejo vicio de vender con papel de celofán las peores cosas”, afirmó finalmente Raimundi.

24.1.06

PAPELERAS: “NO HUBO UN TRABAJO SERIO POR PARTE DEL LADO ARGENTINO; SE ACTUÓ CASI AL FINAL Y ELECTORALMENTE”

La líder del ARI, Elisa Carrió, cuestionó al Gobierno Nacional por el accionar que tuvo en torno a la lucha contra la instalación de las papeleras, al afirmar que “no hubo un trabajo serio, se actuó casi al final y electoralmente” · “Primero se acordó todo y después se empezó a pelear; hubo un pésimo trabajo por parte de la Cancillería Argentina”, insistió · Además, la legisladora indicó que “ningún conflicto, por grave que sea, puede afectar esa comunidad cultural, económica, social; Eso se preserva sobre la base del diálogo”.

Carrió señaló que en el conflicto por las papeleras “hubo un pésimo manejo de la Cancillería argentina. Se actuó al final y electoralmente”, al tiempo que agregó que la posibilidad de que el Uruguay negocie un tratado de libre comercio con los Estados Unidos “desnuda el fracaso del Mercosur, del que son responsables la Argentina y Brasil”.
Consultada puntualmente por su opinión respecto del conflicto por las papeleras, la Diputada Nacional dijo que “hay problemas de medio ambiente involucrados y hubo un pésimo manejo de la Cancillería argentina en toda la parte previa, en lo que fue la comisión conjunta sobre el trabajo en el río Uruguay. No hubo un trabajo serio, se actuó casi al final y electoralmente. Primero se acordó todo y después se empezó a pelear. No hubo un trabajo serio por parte del lado argentino”, insistió.
En una entrevista concedida al diario Página/12, Carrió señaló: “El problema es argentino. Uruguay no tiene desacuerdos. Si la Argentina quería defender el medio ambiente, debería haber trabajado con mayor seriedad. Nada debe enturbiar la relación con Uruguay. Este es el objetivo más importante a preservar: los uruguayos somos nosotros. Ningún conflicto, por grave que sea, puede afectar esa comunidad cultural, económica, social. Eso se preserva sobre la base del diálogo”.
Finalmente, se refirió a la posibilidad de que Uruguay negocie un tratado con Estados Unidos, lo que, según dijo, “está dentro de las posibilidades políticas del propio país, pero al mismo tiempo desnuda el fracaso del Mercosur, del que son responsables la Argentina y Brasil porque son los que, desde hace muchos años, deberían haber asumido el liderazgo de un desarrollo institucional serio, con instituciones transnacionales y con beneficios para todos los países, y no sólo una alianza coyuntural de los grandes intereses económicos para comerciar entre la Argentina y Brasil”.

22.1.06

Carrio: “Somos más parecidos a Bolivia y Venezuela”

No ve una “ola” de izquierda continental porque ve las diferencias entre Bachelet, Chávez, Morales y Tabaré como muy fuertes. Dice que unos llegan al progresismo desde la institucionalidad fuerte y otros desde la débil (lo que, piensa, nos incluye). El “fascismo” kirchnerista, el “pésimo manejo” con Uruguay y lo sagrado del verano.

“Hubo un pésimo manejo de la Cancillería argentina. Se actuó al final y electoralmente”, dispara Elisa Carrió sobre el conflicto con Uruguay por las papeleras. La líder del ARI prende un cigarrillo antes de hablar y guiña un ojo, cuando lanza alguna frase dura con el Gobierno. “Nosotros somos republicanos y este gobierno es fascista”, insiste. Volvió de Mar del Plata y seguirá sus vacaciones con sus hijos a Punta del Este. “El verano es para ellos”, comenta. A pesar de que es prolífica en lecturas, admite que este verano no tocó un libro. “Nada de nada. Jugué a las cartas y al burako. Lo único que volví a leer fue El fin de la certidumbre, de (físico y químico belga) Ilya Prigogine”. Dejando de lado la teoría del caos, Carrió aprueba los procesos de Chile y Uruguay donde hay “desarrollo institucional” frente a los que “no tiene instituciones”. “En esto nos parecemos a Venezuela y a Bolivia”, remata.
–¿Sigue decidida a ser candidata a presidente en 2007?
–(Piensa.) Por lo menos, por ahora, el liderazgo en el partido lo tengo yo. Así que si todo sigue como está, sí.
–¿Cómo va a ser la construcción a nivel nacional?
–El objetivo del año pasado fue organizar el partido y hacer una elección pareja. Por eso, no caminé sólo Capital. Ahora hay que trabajar provincia por provincia. No es fácil enfrentar una elección nacional y provincial en dos años. A partir de esta elección quedaron los partidos tradicionales y el ARI, como un emergente en la centroizquierda. Somos el único partido nacional que nació de la crisis de 2001.
–¿Cuál sería su programa económico?
–Sería absolutamente distinto al de este gobierno. El eje principal es la distribución del ingreso. Desde hace 10 años que proponemos políticas sociales y universales: el ingreso ciudadano a la niñez y a la vejez. Todos el programa social es distinto y el educativo también: buscamos una reforma educativa profunda. Cambiar radicalmente el sistema de la reforma del menemismo y volver a la vieja estructura de primaria y secundaria. Hacer hincapié en la formación del sujeto y en las áreas humanísticas. Nosotros somos republicanos y este gobierno es profundamente autoritario y fascista. A diferencia de Chile, que es el producto de un compromiso de institucionalidad de los sectores políticos y sociales.
–¿Por qué no fue al festejo de Bachelet?
–En general, no viajo. Fui sólo a la asunción de Lula. Estos meses son sagrados: son de mis hijos.–¿Cómo analiza el contexto regional?
–Pareciera el mismo proceso, pero son distintas conductas y liderazgos. Hay una distancia sideral entre Venezuela y Chile. Bachelet es el producto del desarrollo institucional de Chile y Chávez es producto del quiebre institucional de Venezuela. Tabaré Vázquez es el resultado de 30 años de concertación y Evo Morales es el de la emergencia indigenista. Son distintos procesos, diferentes entre sí, y la Argentina tiene el deber de dar un salto institucional. La Argentina sólo va a ser un país desarrollado cuando sea un país libre e institucionalmente sedimentado. A diferencia de Chile y Uruguay, no tenemos instituciones. En esto nos parecemos a Venezuela y a Bolivia: en la ausencia de una institucionalidad fuerte. El peronismo ha contribuido mucho a ello.
–¿Qué piensa del conflicto por las papeleras?
–Hay problemas de medio ambiente involucrados y hubo un pésimo manejo de la Cancillería argentina en toda la parte previa, en lo que fue la comisión conjunta sobre el trabajo en el río Uruguay. No hubo un trabajo serio, se actuó casi al final y electoralmente. Primero se acordó todo y después se empezó a pelear. No hubo un trabajo serio por parte del lado argentino.
–¿Y del lado uruguayo?
–El problema es argentino. Ellos no tienen desacuerdos. Si la Argentina quería defender el medio ambiente, debería haber trabajado con mayor seriedad. Nada debe enturbiar la relación con Uruguay. Este es el objetivo más importante a preservar: los uruguayos somos nosotros. Ningún conflicto, por grave que sea, puede afectar esa comunidad cultural, económica, social. Eso se preserva sobre la base del diálogo.
–¿Cómo ve la posibilidad de que Uruguay negocie un tratado con Estados Unidos?
–Eso está dentro de las posibilidades políticas del propio Uruguay, pero al mismo tiempo desnuda el fracaso del Mercosur, del que son responsables la Argentina y Brasil. Son los que, desde hace muchos años, deberían haber asumido el liderazgo de un desarrollo institucional serio, con instituciones transnacionales y con beneficios para todos los países, y no sólo una alianza coyuntural de los grandes intereses económicos para comerciar entre la Argentina y Brasil.
–¿La propuesta de Ricardo López Murphy de un Foro para la Defensa de la República, está en sintonía con el “contrato moral”?
–Tiempo al tiempo. La oposición tuvo una actitud madura ante el avance del proyecto de reforma del Consejo de la Magistratura de Cristina Kirchner. Pero de eso nadie tiene que hacer un uso electoralista. No soy partidaria de las especulaciones. Si hubiera crisis... podemos hablar.
–¿A qué se refiere con “crisis”?
–Eso se va a ver con el tiempo, tengo muy claro lo que va a pasar en la Argentina... (sonríe, con el suspenso). Y, esta vez, no lo voy a decir.
–Sorprendió su foto con Mauricio Macri. ¿Se imagina una alianza con él?
–No. Y no voy a hacer ni especulaciones ni alianzas. Lo que hicimos está dentro de la defensa de las instituciones, sin lo cual no hay izquierda o derecha posibles. Yo soy autora de la ley original del Consejo de la Magistratura, desde el radicalismo, y me costó dos años de lucha campal que no haya hegemonía, de modo que voy a sumar todos los votos que sean necesarios para impedir este retroceso.
–¿Con quiénes dialogaría?
–Nosotros dialogamos con todos, sobre la base de acuerdos del rol opositor al Gobierno, lo cual no supone que hagamos alianzas con nadie.
–¿Qué lugar puede ocupar Roberto Lavagna en el arco opositor?
–Preguntale a Lavagna.
–Volviendo al tema del Consejo, ¿van a trabar la votación en febrero?
–Vamos a hacer todo lo necesario para que no salga y espero que no tenga los 129 votos. Y si no, tendremos los nombres de los autores y los cómplices. Yo vi cómo nos rechazaban los juicios políticos a la Corte, vi a los mismos reiniciar los juicios, trabarlos en la época de Duhalde y destituirlos finalmente. En consecuencia, puede ser que muchos de los que votaron conmigo la ley del Consejo de la Magistratura, los veamos ahora destruyéndolo. Esto es parte de nuestra lucha, no es ni siquiera parte del rol de la oposición.
–¿La sorprendió la oposición moderada de Rafael Bielsa con este tema?
–Ya no quiero hablar más de Bielsa. Me agotó...
–Si hubiera una modificación en el proyecto, ¿lo votaría?
–El corazón del Consejo es la composición y cualquier número más chico es hegemonía con el Gobierno. Puede ser maravilloso todo lo que pongan en otros artículos, pero lo que están queriendo es controlar el Consejo de la Magistratura para intimidar y silenciar jueces.
–¿Cómo ve el tema de la Corte con siete jueces?
–Estamos de acuerdo. Esta reforma del Consejo es como el aumento a nueve de la Corte en la época menemista: un intento brutal de manipulación de la Justicia para garantizar impunidad a su gobierno. La coherencia con el menemismo es absoluta, aunque ellos legitiman por centroizquierda. Venden como liberación el pago al FMI, que fue lo más funcional que hizo la Argentina con el Fondo. Y las mismas víctimas aplauden al victimario, como ocurrió con (Leopoldo) Galtieri en la guerra de Malvinas. A mí el cuento de la centroizquierda y centroderecha no me lo hacen. Sólo sirve para ver a los Fernández con glamour de centroizquierda. No me interesa ya compartir la opinión con muchos, sino mantener el derecho a la lucidez.

21.1.06

Raimundi negó su candidatura a Gobernador de la Provincia

El diputado nacional y presidente del Ari en la provincia, Carlos Raimundi, negó su posible candidatura a gobernador de la provincia de Buenos Aires. En diálogo con Info Región, aseguró que su prioridad es “ejercer con dignidad" su cargo en el Congreso y "no pensar en las elecciones de 2007”.

El diputado nacional y presidente del Ari bonaerense, Carlos Raimundi, negó en forma categórica su posible candidatura a gobernador de la provincia de Buenos Aires. En diálogo con Info Región, el dirigente arista aseguró que su prioridad es "ejercer con dignidad" su función en el Congreso y no pensar en las próximas elecciones. Ofuscado y a su vez sorprendido por las versiones que lo indican como el hombre con más chances para competir por el Ejecutivo provincial, el legislador sostuvo que “ni soñando” está evaluando la posibilidad de comenzar a trabajar en su postulación a Gobernador y además aclaró que “jamás" hablaría de su candidatura "sin consultarlo con los integrantes de la fuerza”.En la misma línea, aseguró que estos rumores lo perjudican más de lo que lo favorecen en su meta de "trabajar por el fortalecimiento de la fuerza en la Provincia y en todo el país". “Estoy en contra de los candidaturas y los proyectos personales y a favor de la construcción colectiva de una fuerza alternativa. Esto es lo que le interesa a la gente”, resaltó.A la hora de señalar a los posibles candidatos a reemplazar al actual gobernador Felipe Solá, la lista es extensa. Por ahora, el postulante con más chances es el ministro de Gobierno provincial, Florencio Randazzo, hombre de confianza de Solá y de línea directa con Nación. También suenan los nombres del diputado nacional Alberto Balestrini; el ministro de Interior de Nación, Aníbal Fernández; el ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanián y ex diputado duhaldista José María Díaz Bancalari.Mientras que en el plano provincial, según Raimundi, todavía no hay candidatos, en el plano nacional Elisa Carrió comenzó a trabajar por mejorar la estructura del partido de cara a su candidatura a la presidencia de 2007. Fuentes cercanas a la líder del Ari creen que si logran estructurarse bien como una alternativa podrán posicionarse como una verdadera fuerza para enfrentar al kirchnerismo. En este caso, el legislador aseguró que tiene la autoridad para anticipar su candidatura, ya que “es la líder natural de la fuerza”. Y agregó: “Mi caso es distinto yo soy un dirigente más de la fuerza y mi prioridad es cumplir mi función en el Congreso”. En ese camino, una de las primeras tareas de cara al reinicio de la actividad legislativa será el tratamiento del proyecto de reforma del Concejo de la Magistratura, que es impulsado por el Gobierno nacional y tiene en contra el férreo rechazo de los partidos de la oposición, entre los que se encuentra el Ari.

20.1.06

Carrió: "Nos uniremos cada vez que la República peligre"

Defendió la confluencia opositora contra la ley del Consejo de la Magistratura
Para la diputada, "el proyecto intenta aniquilar la Justicia en la Argentina" Sostuvo que "la democracia es sólo formal" y adjudicó al Gobierno "prácticas fascistas"

"Me quedaron sólo tres vicios: café, cigarrillo y eucaristía diaria", bromea Elisa Carrió mientras se acomoda en el living de su departamento de Barrio Norte. La líder de ARI luce bronceada y relajada: se nota que se ha tomado bien en serio sus vacaciones en Mar del Plata luego de un estresante 2005, con elecciones incluidas. Dieta, ocho kilómetros diarios de caminata, partidos de burako con amigas y nada de diarios ni de libros fueron sus rutinas. Antes de retornar a Punta del Este, el polémico proyecto oficialista para reformar el Consejo de la Magistratura vuelve a ubicarla por un rato en el rol que mejor le sienta: el de opositora frontal al Gobierno. "Fue un acuerdo maduro por un tema puntual, pero nos vamos a unir cada vez que la República esté en peligro", explica a LA NACIÓN la diputada, en referencia a la reciente confluencia con macristas, radicales y socialistas en rechazo al proyecto fogoneado por Cristina Fernández de Kirchner. Sin rodeos, califica a la reforma como "un intento para garantizar la impunidad controlando la Justicia". Y advierte: "Haremos todo lo posible para que no salga". Insiste en tildar de "fascistas" a algunas acciones del Gobierno y compara a la administración actual con la del ex presidente Carlos Menem. "Es interesante: a mucha gente le fascina la prepotencia", fustiga, y pide "un gobierno culto y preparado" como el de la flamante triunfadora en las elecciones chilenas, Michelle Bachelet.
-El oficialismo sigue buscando aliados y reformar el Consejo...
-He vivido muchos de estos procesos y he visto defender el Consejo de la Magistratura a los mismos que hoy quieren aniquilarlo. Que quede claro: vamos a hacer todo lo posible para que el proyecto no salga. Si fracasamos, no será con nuestra complicidad.
-¿Qué es todo lo posible?
-Que no tengan quórum ni los 129 votos que necesitan. Si los consiguen, vamos a decirle a la sociedad quiénes son los cómplices del aniquilamiento de la Justicia en la Argentina, cuya principal autora es, obviamente, Cristina de Kirchner.
-¿Se trata de un capricho personal, como aseguraron algunos opositores?
-No, es un intento para garantizarse impunidad controlando la Justicia. El mecanismo va a funcionar muy claramente con los jueces: si investigás al Gobierno te destituimos o no te ascendemos, serán los mensajes. Del mismo modo que el menemismo aumentó a nueve la cantidad de miembros de la Corte para garantizarse impunidad, Cristina baja el número de integrantes del Consejo y le da hegemonía al oficialismo para asegurar que no los investiguen.
-Es el mismo gobierno que impulsó los cambios en la Corte...
-Fueron los tres primeros meses, cuando ellos mismos creían que podían ser buenos (se pone seria). Obtenido el favor popular, comienzan a ser los de siempre. Junto a esto, se viene un aumento de las prácticas fascistas y prepotentes, y habrá que estar tranquilos para bancarse la persecución y opinar aún en contra de lo que opina la gente. Es muy interesante: a mucha gente le fascina la prepotencia. Recuerdo en la década menemista decir a mucha gente: "Qué fascinante es Menem, cómo viola las reglas". Así estamos.
-Desde el kirchnerismo critican mucho estas apelaciones al fascismo del Gobierno...
-El sistema democrático en la Argentina es formal y hay prácticas fascistas, no tengo ningún problema en decirlo: falta de libertad de expresión, aniquilamiento de la Justicia, vaciamiento parlamentario. Eso sí: es fascismo con glamour de centroizquierda.
-¿Qué pasará con la oposición? ¿Hay posibilidad de otras confluencias?
-No hay que hacer especulaciones políticas a partir de un acuerdo opositor maduro en temas institucionales. Vamos a seguir dialogando con todo el arco opositor en el trabajo parlamentario. Pero nada de tipo electoral, eso degradaría el acuerdo.
-Llamó la atención verla compartir una mesa con Macri, López Murphy y Binner...
-Lo vamos a hacer cada vez que la República esté en peligro (piensa). Pero no estamos detrás del rédito personal, lo importante es que la oposición pueda mostrar una clase política más culta y más civilizada, que llegue a acuerdos manteniendo las diferencias ideológicas. No es cuestión de rejuntarse, sí de acuerdos en lo moral, en lo republicanos y en la distribución del ingreso.
-¿Y en qué podría traducirse?
-Al menos en una competencia electoral más razonable. Hay que aumentar el diálogo con todos sin alianzas con nadie, mientras se enfrenta a un gobierno de características fascistas.

19.1.06

Carrió juntó a sus diputados porteños y se reservó su opinión sobre el juicio

Sus dos legisladores le pidieron una reunión. Les dijo que el voto es personal y no del ARI.

Elisa Carrió, la jefa del ARI, volvió a darle señales a Aníbal Ibarra de que su postura en relación con el juicio político no se movió un milímetro: ayer ni siquiera les habría dicho a sus propios legisladores porteños cuál era su posición en relación con el proceso. Por eso, les reiteró que tenían "libertad de conciencia" a la hora de votar en la Sala Juzgadora que evaluará la responsabilidad del jefe de Gobierno porteño en el incendio de República Cromañón.Eran las 7:30 cuando los dos diputados del ARI que integran la Sala Juzgadora tocaron el timbre en la casa de Carrió. Los tres fueron hasta el "búnker" de la jefa, el café de la esquina. "Yo tengo una posición tomada, pero no la van a saber hasta el veredicto", les dijo. Y luego —según contaron fuentes del ARI— les repitió lo que ya sabían: "Tienen que votar lo que les diga su conciencia".Facundo Di Filippo y Guillermo Smith, los dos legisladores de la Sala, habían pedido una reunión con Carrió para discutir cuál iba a ser el papel del ARI en el juicio político. "Nos dijo que debíamos ser lo más sólidos posible y que el voto debía sostenerse con los mejores fundamentos", contó Smith en declaraciones a radio La Red.Pero además, siempre según las versión de los legisladores, Carrió les pidió que no se dejaran presionar por nadie, y allí incluyó al Gobierno de la Ciudad, el macrismo y también a dirigentes propios: "El voto es suyo y de nadie más, acá no va a haber una posición del ARI".En el mismo camino, Enrique Olivera, le aseguró a Clarín: "Nosotros tenemos que garantizar la transparencia y la legalidad del proceso, acá no puede haber impunidad pero tampoco un linchamiento".Olivera, quien acaba de sumarse al bloque del ARI, es uno de las personas con quien Carrió suele compartir largas charlas. Aunque, no integra la Sala, el martes, el ex jefe de Gobierno siguió desde su despacho la declaración de Ibarra.La reunión de Carrió con sus legisladores fue breve. Ellos debían estar en la Legislatura a las 9 y ella, quien el martes llegó de Mar del Plata, debía seguir viaje al Chaco.En el ibarrismo esperaban con ansiedad este encuentro. La posición del ARI —que integró la alianza que lo llevó a la reelección a Ibarra— resulta clave en un juicio donde los votos se cuentan de a uno. Por eso, desde hace varias semanas, el ibarrismo intenta contactarse con la diputada del ARI. Ibarra —según confiaron sus voceros— pensaba reclamarle a Carrió una definición pública sobre el juicio, durante su presentación del martes en la Legislatura. Finalmente, prefirió no decidir nada, en apariencia, para no romper lanzas con la jefa del ARI y sus legisladores. Pero una vez más, Carrió repitió su libreto.

18.1.06

El ARI quiere monitorear a Binner antes de buscar acuerdos

El titular del bloque de Diputados del ARI, Eduardo Macaluse, indicó que esa agrupación primero quiere ver "como actúa dentro de la Cámara" el socialista Hermes Binner para luego decidir si se sientan a conversar con él.
La afinidad ideológica permitió pensar varias veces en un posible acuerdo entre el ARI y el socialismo, pero en las últimas elecciones del 2005 -y también de 2003- se frustró.
Ahora, de cara a 2007, las especulaciones vuelven a despertarse y especialmente luego de una de las últimas fotos del año pasado cuando Binner y la líder del ARI, Elisa Carrió, volvieron a sentarse juntos. Fue en oportunidad de celebrarse la audiencia pública para oponerse al proyecto del gobierno nacional de reforma del Consejo de la Magistratura.
Tanto Binner como Carrió evidenciaron sentirse reconfortados de retomar el diálogo, y se mostraron muy cómodos también, juntos, en una edición del programa de televisión "A dos voces", por TN.Macaluse destacó ayer el relieve de aquel cónclave que aglutinó a principales referentes de la oposición, y dijo que sirvió para "ponerle freno al atropello a la ley".
El diputado consideró que la iniciativa solamente actuó como "una especie de by pass gástrico para el apetito de poder que tiene el Gobierno" y analizó que "no es bueno juntarse contra nadie"."La Argentina no va a cambiar porque le ganemos al kirchnerismo", justificó Macaluse y reafirmó que "no vamos a conformar alianzas de ningún tipo porque no vamos a ganar juntando dirigentes de distintas fuerzas".Es cierto que alguna vez dirigentes del ARI y del socialismo culparon al senador Rubén Giustiniani (titular del PS) de oponerse a un acuerdo en Santa Fe. También puede ser verdad que en caso de sellar el entendimiento, la casi segura postulación de Binner para la Gobernación en 2007 ganaría un aliado valioso para sumar votos. En octubre del año pasado, para diputados nacionales, el socialista obtuvo el 43,05 por ciento de los votos y el ARI (en tercer lugar) el 6,19%. El justicialista Frente para la Victoria (aunque sin la participación de Carlos Reutemann) juntó el 33,28%.Fuentes del ARI señalaron que la posición que demuestre Binner frente al gobierno de Kirchner podrá calentar o enfriar el entusiasmo. Si el coqueteo del socialista con el primer mandatario vuelve a primar, conspirará contra el acuerdo.Para Macaluse, el ARI tiene "la obligación de recorrer todo el país" porque, según opinó, es una cuestión de "solidaridad" concurrir a aquellos lugares donde, a pesar de contar con fuertes figuras oficialistas, la gente "bancó hacer política contra el gobierno".

17.1.06

El ARI busca ampliar su dominio en el interior pero sin alianzas

El ARI deberá ampliar su dominio en el interior si quiere consolidarse como uno de los principales partidos de oposición pero, por ahora, escapa a eventuales coaliciones con la UCR o el socialismo que le permitirían apresurar ese proceso de fortalecimiento.

Sin embargo, en el distrito porteño ya existe un trabajo, liderado por Enrique Olivera, en conjunto entre el ARI y un sector de radicales disidentes que se encuentra enfrentado a la actual conducción del Comité Capital.

A nivel nacional, el titular del bloque de diputados, Eduardo Macaluse aseguró que la estrategia de consolidación no atiende exclusivamente a "una cuestión de campaña" y advirtió a esta agencia que desde el ARI "no vamos a tejer ningún tipo de coalición prematuramente".

A pesar de sus logros electorales en la Capital y la provincia de Buenos Aires, el ARI de Elisa Carrió entendió que, si quiere conservar su creciente rol dentro del arco opositor, debe ampliar su base a nivel nacional y, con ese objetivo, fijó una agenda de actividades a cumplir.

Según precisó a esta agencia el titular del ARI bonaerense, Carlos Raimundi, este cronograma, que tiene su primer compromiso a fines de febrero, incluirá encuentros de los principales dirigentes de las distintas provincias cada 45 días, que servirán para abrir nuevos canales de comunicación e impulsar la integración de las diferentes regiones en el armado nacional.

Para Macaluse, el ARI tiene "la obligación de recorrer todo el país porque, según opinó, es una cuestión de "solidaridad" concurrir a aquellos lugares donde, a pesar de contar con fuertes figuras oficialistas, la gente nos bancó hacer política contra el Gobierno".

Hace algunas semanas, el polémico proyecto de reforma al Consejo de la Magistratura motivó una audiencia pública que reunió a los principales referentes de la oposición que, para Macaluse, sirvió para "ponerle freno al atropello a la ley".

Sin embargo, el diputado consideró que la iniciativa solo actuó como "una especie de by pass gástrico para el apetito de poder que tiene el Gobierno" y analizó que "no es bueno juntarse contra nadie".

"La Argentina no va a cambiar porque le ganemos al kirchnerismo", justificó Macaluse y reafirmó que "no vamos a conformar alianzas de ningún tipo porque no vamos a ganar juntando dirigentes de distintas fuerzas".

En un primer momento, la afinidad ideológica permitió pensar en un posible acuerdo entre el ARI y el socialismo, representado por Hermes Binner, pero tampoco tienen previsto iniciar conversaciones, sino que primero quieren ver "cómo actúa dentro de la Cámara", indicó Macaluse.

Después de las elecciones, varios dirigentes radicales como el titular del Comité Nacional, Roberto Iglesias y la secretaria general Margarita Stolbizer, expresaron su intención de acercar posiciones con el ARI que, hasta el momento, no parece dispuesto al diálogo a nivel nacional.

No obstante, Olivera -uno de los posibles candidatos a Jefe de Gobierno del ARI- aseguró que en la Capital, el ARI ya está trabajando con un importante sector integrado por radicales disidentes que rechazan la conducción tradicional y que, en cambio, reconocen a Carrió como la "continuadora histórica de los liderazgos" del centenario partido.

En tanto, Raimundi no cree que la UCR pueda ser un "obstáculo" para el ARI en la carrera hacia el 2007 ya que, según dijo, "no está cohesionado" y, lejos de un entendimiento, criticó a un sector de ese partido que es "plenamente acuerdista".

16.1.06

Carrio: "En este gobierno hay mas corrupción que en el menemismo"

La jefa del ARI y diputada nacional Elisa Carrió sostuvo que en el actual Gobierno nacional «hay más corrupción» que durante la administración del ex presidente Carlos Menem.

La jefa arista y diputada nacional Elisa Carrió dijo que la primera dama, la senadora Cristina Fernández, "está haciendo lo mismo que el menemismo" al intentar imponer la reforma al Consejo de la Magistratura. "Soy autora de la ley que impidió la mayoría del menemismo y Cristina me acompañó en ese momento, pero ahora está haciendo lo mismo que el menemismo", se quejó Carrió. En declaraciones televisivas, la jefa del ARI rechazó la crítica pública que la primera dama realizó al vicepresidente Daniel Scioli en recinto de la Cámara baja, a quien responsabilizó por la difusión de la decisión de sacar al senador socialista Rubén Giustiniani de la Comisión de Asuntos Constitucionales. La decisión de separar a Giustiniani de esa comisión –después revocada- había sido vinculada a su rechazo a la reducción del Consejo de la Magistratura y a una orden emanada desde el Gobierno nacional a pedido de la primera dama. "La relación del Gobierno con Scioli es muy difícil. Nosotros mostramos toda la solidaridad, no con Scioli sino con la Vicepresidencia. No se puede mostrar solidaridad con Scioli porque sino lo persiguen más", dijo Carrió. Y concluyó: "esto es grave para el país porque no se puede utilizar una institución. A Scioli lo buscaron porque tenía buena imagen. Y Cristina no es cualquier senadora, es la esposa del Presidente".
«En algunas áreas, como Pesca y Minería, hay más corrupción que con el menemismo», afirmó Carrió y preguntó: «¿cómo va a generar confianza un Presidente que no puede explicar dónde están 500 millones de dólares?».La jefa arista recordó así la existencia de fondos pertenecientes a la provincia de Santa Cruz que fueron depositados en el exterior cuando Kirchner era gobernador.En declaraciones televisivas, Carrió volvió a criticar además al ministro de Planificación, Julio De Vido, y señaló: «tuve 17 querellas y vengo ganando 14». Reclamó también al Gobierno que termine con los planes sociales porque «es una forma perversa de distribuir el dinero» y afirmó: «es perverso que les cambian 150 pesos por los votos. Hay que liberar a los pobres, hay que darles empleo».

14.1.06

El ARI no descarta alianzas de cara a las próximas elecciones

El diputado nacional y presidente del ARI en la provincia, Carlos Raimundi, aseguró que la meta de este año será difundir la propuesta de la fuerza y comenzar a delinear futuras alianzas “de confianza” de cara a las elecciones de 2007. En diálogo con Info Región, reafirmó el objetivo de fortalecer el lazo entre el partido y la sociedad.

El diputado nacional y presidente del Ari bonaerense, Carlos Raimundi, aseguró que la prioridad para este año será “trabajar por el fortalecimiento institucional y territorial en la provincia y promover alianzas de confianza con otros sectores de cara a las elecciones de 2007”. En diálogo con Info Región, el dirigente arista remarcó la necesidad de fortalecer el lazo entre el partido de Elisa Carrió y la sociedad.
Otra de las metas expuestas por el dirigente para este año será promover la idea fundadora de contrato social entre la población tanto de la provincia como de todo el país. “Teniendo en cuenta que el concepto de contrato social suena al gran público como algo abstracto, buscaremos llevarlo al terreno de lo tangible y lo más visible”, sostuvo el dirigente.
Y en esa línea, agregó: “es necesario transformar esta idea en calidad educativa, en agua y proteínas, en el respeto por la palabra y por la ley, en la pacificación de la sociedad y la recuperación de la dignidad, perdida por los argentinos en la ultima década”, evaluó.
Al mismo tiempo, Raimundi sostuvo que los dirigentes aristas se abocarán a la tarea de consolidar tanto en el aspecto institucional como territorial a la fuerza. “La idea es reforzar el desarrollo partidario donde se encuentra en un estado incipiente y obviamente, continuar con el trabajo en las provincias más desarrolladas como en Buenos Aires, Santa Fe, Neuquen, Chaco, La Pampa y Tierra del Fuego”, señaló.
De cara a los próximos comicios, Raimundi aseguró que el objetivo es convertir a la fuerza en una alternativa de gobierno y en ese senda -sostuvo- se elegirá “el camino del consenso y el trabajo en la sociedad y no el atajo que permita triunfos artificiales”.“Queremos ser un partido de gobierno; el problema es que para llegar a ser gobierno hay un camino y un atajo. El atajo es crecer rápido haciendo pactos de cúpulas, y el otro criterio, aunque demande más tiempo, es crecer por la legitimación real de nuestra propuesta”, afirmó.
En ese sentido, el dirigente aseguró que prescindirán de “alianzas artificiales” para promover acuerdos con “sectores de confianza”. “Las alianzas llevan tiempo de construcción, pero de lo que estamos seguros es de que no se deben basar en tener un discurso parecido, sino en las conductas que generen confianzas profundas”, aclaró.
Raimundi fue elegido por consenso para presidir nuevamente la presidencia del ARI en la provincia, pero todavía resta esperar la convalidación de la elección que se realizará en el congreso partidario previsto para febrero. En la misma línea, fue elegido como vicepresidente de la fuerza el intendente de San Martín, Martín Ivoskus.

10.1.06

ARI: “Dialogaremos con la condición de que no se cambie el equilibrio”

El diputado Adrián Pérez aclaró que su fuerza está abierta a buscar consensos con el Gobierno sobre el proyecto de modificaciones en el Consejo de la Magistratura. Pero manifestó que sólo bajo la condición de que se deje de lado la intención de reducir la representación de las minorías políticas.

El ARI aseguró estar “abierto al diálogo” con el oficialismo para discutir modificaciones al proyecto de reestructuración del Consejo de la Magistratura, pero sólo bajo la condición sine qua non de que se deje de lado el intento oficial de reducir la representación de las minorías políticas en el cuerpo.Así lo expresó el diputado Adrián Pérez, al sostener que hay transformaciones por realizar en el órgano que castiga y designa a los jueces, pero que nada tienen que ver con aumentar la proporción de representantes del oficialismo en el Consejo.“Si va a haber modificaciones que tengan que ver con mejorar el funcionamiento del Consejo sin cambiar el equilibrio en su composición, estaríamos dispuestos a dialogar con el oficialismo para consensuar posiciones. Pero sólo bajo el criterio de mantener el equilibrio entre la representación de los sectores políticos, académicos y magistrados, además de la integración de minorías y segundas minorías”, sostuvo, en diálogo con Info Región.Las palabras del arista responden a la estrategia con la que ayer salió el oficialismo a reducir las disidencias que produce el polémico proyecto, cuando a través de diferentes referentes del Frente para la Victoria abrió el juego a que la oposición proponga modificaciones a la iniciativa.Por ejemplo, el diputado kirchnerista Héctor Recalde afirmó que su sector está predispuesto a escuchar los aportes de los partidos de la oposición y a incluir modificaciones para obtener el consenso de la mayoría.Más allá de la apertura a aceptar la invitación, Pérez dejó en claro la desconfianza de su sector sobre la legitimidad de la flexibilización del Gobierno en su postura, luego de las acusaciones de ‘complot’ que lanzó las últimas semanas contra los sectores opositores que se unieron en el Congreso para rechazar la iniciativa.”Este reforma tiene que ver con el intento del Gobierno de manejar la Justicia, por lo que no creo que esté dispuesto a resignar la posición mayoritaria que el proyecto prevé para sus hombres”, manifestó.La iniciativa oficialista prevé la reducción de miembros del Consejo de la Magistratura de 20 a 13 miembros, con una baja de ocho a seis legisladores, que significaría la desaparición de los representantes de la segunda minoría política.Así, el oficialismo quedaría con 5 de los 13 representantes, ya que sumaría los 4 que le quedarían a la mayoría parlamentaria más el que le corresponde al Gobierno. Justamente esa redistribución es la que mayores críticas genera de parte de la oposición.Frente a las acusaciones gubernamentales que indican que “todo el espectro político” reclamaba transformaciones en el órgano, Pérez detalló cuáles son los cambios que para el ARI se deben realizar sin necesidad de modificar el equilibrio de fuerzas. “Algunas de las cuestiones a mejorar son: que todas las audiencias sean públicas; que se acorten los procedimientos de remoción y designación; darle transparencia a través de la difusión de la declaración jurada de todos sus integrantes; y, en definitiva, terminar con la burocracia del órgano no a través de la reducción de miembros, sino a través la optimización de la conformación actual”, enumeró.

9.1.06

"Los errores más grandes se han hecho con el aplauso colectivo"

—Tomando en cuenta cómo finalizó el año, en una cruzada contra el Gobierno por la modificación del Consejo de la Magistratura, qué augura para este año que se inicia?
—Será extremadamente difícil, pero por otro lado liberador. Lo que viene es paradojal.
—¿Dónde ve esa paradoja?
—Es que, por un lado, hay que enfrentar la enorme dificultad que plantea la metodología fascista del Gobierno, legitimado por bastos sectores de la sociedad, y por otro, porque es algo que tenía que suceder.
—¿Por qué?
—Es mejor que suceda antes. Cuando denunciaba la metodología fascista decían que exageraba. Seis meses después todo el mundo usa ese término. La situación no es fácil.
—No cree que la situación pueda cambiar...
—Pero tengo la profunda esperanza de que se aprenda. O se aprende por lucidez, o por dolor. Pero acá parece que se aprende por dolor.
—Quiere decir que no habrá cambios en el Gobierno en cuanto a los métodos que denuncia.
—Mucha gente confunde fascismo con totalitarismo. El fascismo tiende a cooptar y comprar a las organizaciones intermedias, a los medios de comunicación, amedrentarlos, persigue opositores, y tiene liderazgos que fomentan el resentimiento popular por largos fracasos. En las sociedades que tuvieron muchos fracasos, muchas frustraciones, existen liderazgos que fomentan una especie de reivindicación vengativa del resentimiento.
—¿Quién gana entonces?
—Los que no tienen precio. Aunque el camino sea difícil, esta pelea la ganamos los que no somos susceptibles de ser cooptados.
—El panorama que está dando para 2006 no es nada alentador...
—Es que va a ser difícil. Pero quiero que todo el mundo pase un buen verano, y yo también. Es que hay hechos objetivos: entrega de reservas del país, intento de aniquilamiento de la Justicia, vaciamiento parlamentario y operaciones sucias contra la prensa y la oposición. Parece inevitable que Kirchner empiece a desarrollar al extremo su propia lógica de poder.
—Se acaban de desembolsar casi 10 mil millones de dólares para cancelar la deuda con el FMI. Cualquiera diría que se está lejos de una crisis.
—Para nosotros es un error enorme. Pero los errores más grandes de este país se han hecho con el aplauso colectivo: Malvinas, el Plan Brady, la privatización de YPF. Se trata de un llamado a nosotros, como sociedad. ¿Qué nos pasa que no vemos lo obvio? ¿Qué nos pasa que a las entregas las disfrazamos de liberación?
—¿Sobre qué temas va a trabajar fuerte el ARI este año?
—Trabajaremos en el Congreso, nos votaron para eso, independientemente de avanzar en la construcción del partido.
—López Murphy lanzó la idea de un foro opositor.
—Hicimos un enorme esfuerzo a fin de año para acordar con toda la oposición el rechazo del Consejo de la Magistratura. Estas cosas no pueden ser usadas política ni electoralmente.
—Llamó la atención verla en esos días junto a Mauricio Macri. ¿Qué relación tiene con él?
—No hay relación. El acuerdo fue de todos los bloques opositores del Parlamento. Era imprescindible. No implica ningún acuerdo político ni electoral.
—El tema de la corrupción recurrente en su discurso.
—Es que actualmente está en niveles iguales o mayores que en la década menemista. Mayor en obras públicas, en minería, en transporte.
—¿Sus legisladores porteños votarán la destitución de Aníbal Ibarra en el cargo?
—Algunos diputados del ARI son miembros del jurado, ellos tienen obligaciones.
—Pero usted debe tener alguna postura tomada...
—Yo no voy a tomar parte.
—¿Cree que el Gobierno va a poder frenar el avance de la inflación?
—No en estas circunstancias. Pero es una inflación controlable si se tiene racionalidad. Lo que este gobierno tiene es una profunda crisis de racionalidad política. Si eso se traslada a la realidad económica esto no se arregla.
—Habrá recorrido Mar del Plata y visto las obras que dejó la Cumbre de las Américas. ¿Qué más dejó?
—Un papelón para todos los argentinos. Nunca un país anfitrión se portó como la Argentina en la Cumbre. Cuando el presidente del país anfitrión trata de hacer electoralismo fácil con una cumbre de presidentes, habla de la barbarie de ese presidente, pero también deja muy mal parado al país.

7.1.06

Maffei apoyó parcialmente el "Foro por la República"

La diputada nacional del ARI sostuvo que la idea del líder de Recrear de conformar el Foro por la República “en defensa de las instituciones”, “tiene un costado interesante”, aunque advirtió que “López Murphy debería lograr que su propio partido tuviera conducta en ese sentido”. “Si se habla de defender las instituciones no alcanza con hacer declaraciones en los medios”, sostuvo.

La idea de Ricardo López Murphy de crear un “Foro por la República” para “defender las instituciones del país” y para cumplir “una función pedagógica sobre la sociedad civil y la comunidad intelectual”, despertó el enojo del gobierno nacional, y diversas opiniones desde la oposición.Si bien no se mostraron abiertamente en contra, desde el ARI opinaron que la iniciativa “tiene un costado interesante”, pero le reclamaron al líder de Recrear que para lograr lo que se propone debería conseguir que sus palabras se reflejen en la conducta de los legisladores de su fuerza.“Es interesante tener iniciativas alrededor de la defensa de las instituciones, ya lo habíamos planteado nosotros y específicamente (Elisa) Carrió. De todos modos, sería bueno que el doctor López Murphy lograra que su propio partido tuviera conducta en ese sentido, porque en definitiva no alcanza con hacer declaraciones en los medios”, señaló la diputada Marta Maffei, en diálogo con Info Región.Y aclaró: “Hay mucho legisladores que se han unido al PRO -alianza que integran Recrear y Compromiso para el Cambio- y que tienen luego conductas extrañas. Esto hay que votarlo, hay que defenderlo, porque no se sostiene con expresiones de deseos de los líderes que están fuera del Parlamento”.En esta línea, quien fuera candidata a senadora por la fuerza que conduce Carrió admitió la importancia de resguardar las instituciones, pero destacó que más allá de esta iniciativa se debe trabajar para que las mismas funcionen en beneficio de la ciudadanía.“Para nosotros no sólo hay que defender las instituciones, sino también lograr que cumplan el rol que nosotros pretendemos que cumplan: la redistribución del ingreso, la justicia social, la mejor educación, la mejor salud y la mejor seguridad, No podemos seguir teniendo las instituciones en función de los grupos económicos”, se quejó.Por otra parte, la legisladora descartó la posibilidad de realizar un proyecto alternativo al cuestionado proyecto de reforma del Consejo de la Magistratura, que impulsó desde el Senado la primera dama, Cristina Fernández, y que no llegó a debatirse en la Cámara baja nacional por las críticas y el nulo consenso que logró en las filas de la oposición.“No se debe presentar ninguna propuesta alternativa porque cualquier dictamen en minoría será tomado por el PJ para lograr un proyecto que de alguna manera tome o modifique el proyecto original, vuelva al Senado y el Senado, que tiene mayoría absoluta del justicialismo, sancione el proyecto original”, indico Maffei.Y concluyó: “La unión de la oposición es un elemento importante para frenar los avances del Gobierno, pero lo esencial es que las mayorías, sean del partido que sean, tomen conciencia de que no se puede rifar la República por el beneficio de algunos de los funcionarios del poder”.

6.1.06

Raimundi: “Hoy, el ARI es básicamente Elisa Carrió"

Reconoce que, por su juventud, el partido se construye detrás de la figura de Lilita. Pero advierte que no quieren repetir la experiencia del Frepaso. “Nosotros no queremos que, en una década, el ARI siga siendo Elisa Carrió”, dice. Y opina que la incorporación de Enrique Olivera no fue un error.

Remera, bermudas y sandalias. Lejos del traje y del Congreso, Carlos Raimundi eligió Villa Gesell para descansar junto a su esposa y sus tres hijos. El flamante diputado nacional por el ARI llega temprano al balneario para “que los chicos puedan disfrutar, porque después se llena de gente”. Café de por medio, le confiesa a Hoy que, con el ARI, no quiere repetir la experiencia del Frepaso. Cuestiona a buena parte de la sociedad, “porque tiene una tendencia a no escuchar la verdad”. Y asegura que el apoyo a la cancelación de la deuda con el FMI le hace recordar al titular “Estamos ganando”, mientras se disputaba la guerra de Malvinas.

-¿Quiere ser gobernador?
-No creo en las autopostulaciones. A mí me interesa construir una fuerza política alternativa. Ahora, cuando uno quiere construir a partir del candidato, se desmorona la construcción.
-Si se termina Carrió, ¿se termina el ARI?
-A mí me parece un error pensar que el ARI es sólo una figura que se proyecta. Es una figura que se proyecta, que conecta con la necesidad de una parte de la sociedad. Y esa necesidad de una parte de la sociedad no va a desaparecer porque desaparezca una figura. Fijate que desapareció Chacho Alvarez...
-Y desapareció el Frepaso...-
Pero no desapareció el espacio.
-Pero hoy, sin Carrió, desaparecería el ARI como partido. No hay una figura más fuerte que pueda encolumnar a tanta gente...
-No es una respuesta sencilla. La Argentina tiene una historia de liderazgos carismáticos. Pero hay una necesidad de conectar esos liderazgos personales con una necesidad de la gente. Perón decía: Necesito construir una organización que me trascienda. Y Perón murió y el PJ subsistió.
-Los únicos que lo lograron fueron el PJ y la UCR...
-Pero estamos hablando de décadas, y el ARI tiene cuatro años.
-Por eso, hoy el ARI es Elisa Carrió...
-Sí. Hoy el ARI básicamente es Elisa Carrió. La pregunta es: ¿nosotros queremos que dentro de diez años el ARI siga siendo Elisa Carrió? No. El ARI debe ser la expresión de una necesidad de la sociedad. Esos liderazgos personales hay que convertirlos en liderazgos institucionales. El líder se debe apoyar en una estructura, porque corremos el riesgo de desaparecer. Además, muchos venimos del Frepaso y tuvimos esa experiencia. Por lo tanto, no la queremos repetir.
-El ARI es un partido nuevo, pero tiene conflictos internos que parecen de partidos tradicionales.
-Porque uno no puede escapar del proceso de fragmentación. Es decir, todavía el ARI no ha logrado cohesionarse definitivamente.
-¿Y la incorporación de Enrique Olivera fue un error?
-Para mí no fue un error, pero sí noto que hay mucha gente que cree que fue un error. A mí me parece también que es un proceso que va a seguir. Enrique Olivera está y tiene que consolidarse. A medida que se va consolidando, se van evaporando los efectos negativos. Olivera entra en una coyuntura en Capital Federal, donde la suerte de Ibarra estaba muy marcada. Entonces Lilita necesitaba poner una figura fuerte que pudiera ser candidato a jefe de Gobierno, y ella mantenerse en el plano nacional. En el plano del liderazgo nacional y de la candidatura presidencial de 2007.
-Es decir, Carrió trajo a Olivera para que fuera en el futuro candidato a jefe de Gobierno...
-Sí, en 2007 o antes, en una eventual elección anticipada.
-¿Y ese proyecto sigue en pie?
-No lo sé, porque cambiaron las circunstancias.
-Se cuestionó mucho la frase del “contrato moral”. ¿Son conscientes?
-Sí. Estamos trabajando permanentemente en esto. Y yo reafirmo la idea del contrato moral, pero la reafirmo desde esta perspectiva. Asumo como un error no haber cometido la teología en catecismo. Faltó un trabajo de análisis de discurso, para hacer que el contrato moral fuera una idea accesible al grueso de la sociedad. El contrato moral en el Conurbano es agua potable. Es educación de calidad.
-Pero no lo supieron explicar...
-Asumo que no se explicó correctamente. No alcanzamos a llevarlo al plano de lo concreto.
-Pareciera que lo mismo pasó con las denuncias que hizo Lilita...
-Yo creo que no hay que dejar de hacer denuncias. Como verdad, como valentía. Acá hago una apelación a la conciencia de la sociedad. Indudablemente hay una mala predisposición de la sociedad a escuchar la verdad, porque entonces si yo admitiera esto, tendría que decir que, como la verdad no prende, hay que dejar de decirla. Cuando veo que el 70 o el 80% de la sociedad está de acuerdo con el pago al FMI, me hace acordar al “Estamos ganando” de Galtieri. Es decir, “Nos estamos sacando de encima al Fondo”, con el que tenemos el 7 por ciento de deuda. Se quiere presentar como una gesta antiimperialista una cosa que estaba absolutamente diagramada por el FMI. Es una maniobra del sistema financiero internacional, que está deslegitimado y necesita modificarse y liberarse de pasivos. Es indudable que hay algo por lo que no podemos hacer de nuestro discurso un discurso de mayorías. Pero lo vamos a seguir intentando.

3.1.06

Carrió dijo que el pago al FMI es "un inmenso error"

La titular del ARI calificó como un "inmenso error" el pago adelantado de la deuda al FMI que se concretó hoy porque, según evaluó, la decisión "puede tener consecuencias muy difíciles para la Argentina"

Para Elisa Carrió, la cancelación de las obligaciones con el organismo de financiamiento "se trata de un acto innecesario de disponibilidad de todas las reservas que son las que respaldan la base monetaria".Además, cuestionó la medida porque las reservas destinadas al pago "eran las que nos permitían en los próximos dos o tres años hacer frente a cualquier crisis inflacionaria interna, a cualquier golpe de mercado o a una crisis internacional", indicó.
Tras el pago de la deuda realizado esta madrugada, que sumó poco más de 9.500 millones de dólares, la diputada rechazó los argumentos del Gobierno y señaló que "no es cierto lo que dice el Presidente de la República (Néstor Kirchner) que ganamos independencia externa, porque la idea de soberanía es una idea de independencia de decisión".En vez de pagar todos los compromisos en una sola vez, la dirigente sostuvo que "deberíamos haber primero negociado una quita para cancelar", según un comunicado partidario.
En ese caso, Carrió sugirió que debería haberse realizado "en tres partes, en tres años, lo que nos permitía quedarnos con las reservas, y asegurarnos en lo interno y al mismo tiempo distribuiringresos, aplicar una política social y de crecimiento sostenido".

2.1.06

Obra pública: corrupción e impunidad

La historia de la obra pública en la Argentina ha estado frecuentemente asociada a hechos graves de corrupción que periódicamente involucran tanto al poder político como al poder económico de la Nación.
No son pocos los casos en nuestra historia en los que la construcción de tal o cual represa, el tendido de tal o cual vía férrea o la apertura de algún camino generaron fuertes denuncias de sobreprecios, sobornos o cualquier otro tipo de ilícitos. Para el caso basta recordar la emblemática construcción de la represa hidroeléctrica Yacyretá, que fuera señalada por muchos como un "monumento a la corrupción". Todos recordamos, a su vez, a la "patria contratista" de los 80, forjada por la alianza de los grandes grupos económicos con las sucesivas juntas militares de la década anterior.
Sin ir más lejos, la cercana renuncia del ex ministro de Economía Roberto Lavagna tuvo como disparador las denuncias que hiciera sobre maniobras de "cartelización" en la obra pública encargada por el actual gobierno.
Poco tiempo atrás, la administración Kirchner decidió anular tres procesos de licitación dirigidos a la construcción de cárceles en Mercedes, Santa Fe y Salta. La decisión buscó tapar un proceso escandaloso que comenzaba a ser difundido a la ciudadanía a partir de una denuncia penal presentada desde el ARI.
Se trataba de licitaciones que exponían con claridad cómo procede el Gobierno nacional a la hora de atribuir en el sector privado la obra pública. El proceso era manifiestamente irregular; su denuncia ante la Justicia motivó, poco tiempo después, la marcha atrás del proceso de licitación.
Posteriormente se supo, a través de los medios de comunicación, que un ministro del Ejecutivo nacional había renunciado por haberse negado a avalar con su firma la construcción de estas cárceles. Es que los entonces ocupantes del Ministerio de Justicia advirtieron que en los tres procesos de licitación el Gobierno decidió aumentar discrecionalmente y sin justificación posible los presupuestos que originalmente se habían fijado para la realización de las obras.
En la licitación para la construcción de la cárcel de Santa Fe, el aumento del presupuesto original se elevó en un escandaloso 89 por ciento, mientras que para las construcciones de las cárceles de Mercedes y Salta, los aumentos fueron de un 65 y un 59 por ciento respectivamente. Pocas semanas después llegó la denuncia de Lavagna y su casi inmediata renuncia.
Queda claro que la matriz de corrupción enquistada en la obra pública desde la década del 70 sigue firme y tiene consecuencias institucionales por demás graves, sin contar el perjuicio económico al Estado que estas prácticas acarrean. El antídoto para contrarrestarlas es el mejoramiento de la calidad institucional, lo que necesariamente conlleva independencia de los tres poderes del Estado y más y mejores controles del accionar del Ejecutivo desde el Parlamento y la Justicia.
Las últimas sesiones del Congreso, en las que el oficialismo impuso su peso para aprobar un presupuesto que delega amplias facultades legislativas en el Jefe de Gabinete y una prórroga de la Ley de Emergencia Pública que le ha permitido al Ejecutivo renegociar los contratos de servicios públicos sin aprobación del Parlamento, impidieron avanzar en el control efectivo de los actos de Gobierno.
De votarse en febrero, la modificación del Consejo de la Magistratura garantizará su posterior impunidad.